Una ilusión que ya no se marcha, que entre agujas y colores se marca en mi espalda; dolores punzantes y vibrantes, una cerveza, una mano amiga, una herida que sangra. Sonidos alarmantes, nervios que se rasgan; el hambre que crece y yo sigo de espaldas... sigo de espaldas.
La vos experta de un A cualquiera recorre los sonidos de una canción que pena; que triste y monótona deve de ser su vida, obligada a ser tocada sin fin en cualquier parte, sin poder escoger entre un salón o ir a Marte; sin poder callara ni decir nada, simplemente repitiendo con su voz cansada, aquella melodía que de nueva agrada!, que embelesa y recrea una emoción olvidada. Pero el tiempo pasa y el alma se cansa, de esa voz inerte que lo mismo parla. Que triste y monótona deve de ser su vida, mientras yo vuelvo a la mía que por ahora calla.
De espaldas me encuentro, pero la mirada ya no habla, cierro los ojos y aprieto las palmas.
La sangre que fluye y tintura mi espalda y esos rojos ojos que por fin me marcan.
Al fin aparecen! grandes y carentes de párpados, obligados siempre a vigilar mis pasos.
Ellos no hablan, ellos no callan, tan solo me susurran lo que mi alma emana, por fin se ven, por fin emergen, ya era hora que mostraran su belleza demente.
La luna brilla y se regala, a una hermosa dama que hace tiempo la extrañaba. Brilla a lo lejos entre nubes y alta; pero solo 3 entienden su mirada...
El... ella... y yo.
Nada cambia... todo para... hace mucho estamos aquí, mucho mas nos depara...
El se ríe
Ella lucha
Yo sonrió
El no sabe
Ella ignora
Yo solo escribo...
Unos se niegan a ver otros pretenden nada perder, la voz no me sirve, solo las palabras... no se a donde iremos a parar, que haria yo si esta ilusión se marchara?
El se ríe
Ella llora
Yo medito
El no sabe
Ella intuye
Yo solo escribo...
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